Activité-Paranormale

La noche del 1 de mayo, alrededor de las 10:00 p. m. hora local, un tranquilo atardecer en Owasso tomó un giro inesperado cuando un testigo solitario reportó haber visto un objeto volador no identificado deslizándose silenciosamente por el cielo, cerca del campus de Tulsa Tech.

El avistamiento, documentado por el National UFO Reporting Center (NUFORC), describe un objeto oscuro de forma rectangular —del tamaño aproximado de una furgoneta grande o un camión de carga— moviéndose lentamente a una velocidad estimada de entre 30 y 50 km/h. El objeto fue visto desde tierra con un ángulo de elevación de aproximadamente 30 grados, viajando de norte a oeste, cruzando la autopista en dirección a una iglesia cercana.

“No había nubes, ni viento”, comentó el testigo. “Al principio pensé que era un avión atravesando una nube, pero me di cuenta de que el cielo estaba completamente despejado”.

Lo que más llamó la atención del observador fue la forma extraña y el comportamiento del objeto. Descrito como una “enorme capa o lona” con ondulaciones rígidas que no se movían, parecía una masa sólida de color negro o gris oscuro, destacándose sobre el cielo nocturno. No emitía luces, no hacía ruido y no tenía ningún sistema de propulsión visible. Solo se podía distinguir ligeramente gracias a la iluminación de los comercios cercanos.

Otro detalle inquietante fue la presencia de un avión en las inmediaciones en ese momento, aunque no se ha establecido ninguna relación entre ambos.

Este avistamiento se suma a una creciente serie de fenómenos aéreos inexplicables reportados en el Medio Oeste estadounidense, una región conocida desde hace décadas por encuentros misteriosos en el cielo. Aunque el NUFORC aún no ha emitido un análisis oficial, el caso sigue abierto.

¿Podría tratarse de tecnología militar secreta? ¿Una ilusión óptica? ¿O algo más allá de nuestra comprensión? Lo único claro es que los cielos de Owasso mostraron algo fuera de lo común esa noche, y el misterio continúa.